Se lava las manos y la cara siemrpe antes de ducharse (el orden es importante). Los que la espían por la ventana piensan que es una maniática, una pobre chiflada. Pero la verdad es que no es ella la que anda metida en ventana ajena... No, en realidad lo hace como un intento desesperado por despejarse la mente, como si lavándose antes de lavarse fuese a tener el doble de oportunidades durante el día. Oportunidades... se decía a sí misma mientras miraba al agua correr... En el fondo, le atormenta pensar que alguien pueda entrar y desvalijarle su regular rutina... Manuela siempre deja bien cerrada la puerta. Empujón hacia dentro, giro, giro, giro. Golpe seco. Ella es Manuela y éste su blues...
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